El poder del amor

Juan 3:16

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”.

La Biblia dice que de tal manera amó Dios al mundo, eso quiere decir que él me amó tanto y te amo muchísimo a ti. Hoy, la palabra amor está siendo usada de manera muy relajada. Entre los jóvenes cuando usan esta palabra, la usan tanto que ha sido diluida. Cuando Dios usó la palabra amor, la usó de una manera tan poderosa para decirnos lo que él siente hacia nosotros. Él no solamente lo dijo con sus  palabras, sino que lo dijo con sus acciones. El amor de Dios es extremadamente poderoso y tú pudieras decir qué hizo para mostrarnos el amor que tuvo para nosotros. Lo que él hizo fue que dio a su Hijo unigénito en la cruz del calvario para morir por nosotros. Jesús vino a este mundo e hizo tantos milagros, sanó a tanta gente y gente mala lo quería matar e hicieron lo que pudieron para crucificarlo. Cuando llegaron hasta Jesús uno de sus amigos más cercanos lo traicionó, lo tomaron y lo torturaron y recuerda que lo hizo por ti y por mí.

Comenzaron primero poniéndole algo sobre su cabeza, lo golpeaban y le preguntaban ¿quién te golpeó? Y él no respondió. Lo golpeaban hasta que sangraba y le escupieron, este es nuestro Salvador al que le hicieron esto. Después quitaron sus ropas, lo amarraron y usaron un látigo con nueve cabezas, en este látigo ponían cosas muy filosas, ponían cosas puntiagudas, vidrios, piedras y mantenían al Señor Jesús con manos atadas y tomaban ese látigo y le daban alrededor de su cintura y esos objetos puntiagudos penetraban en su carne, después jalaban ese látigo rasgando todo su cuerpo y en cualquier momento el Señor Jesús pudo haber pedido la ayuda de su Padre celestial, pero a través de todo su dolor él pensaba en ti y decidió seguir adelante porque si él se hubiera rendido no podríamos ir al cielo.

Después le dijeron que tenía que llevar una cruz de madera muy pesada y grande, puedo imaginar a él cargando esa cruz y cómo dañaba su hombro y tenía que subir una montaña y finalmente una hombre vino en su ayuda y cuando llegaron a ese lugar lo pusieron en esa cruz, pusieron clavos grandes entre sus manos y después pusieron sus pies uno frente al otro y los atravesaron con un clavo grande y nuevamente pudo haberse rendido y haber hablado con su Padre celestial, pero él pensó en ti y en mí y siguió adelante. Tomaron esa cruz y había un hoyo muy grande ahí y tomaron esa cruz y dejaron caer el peso de esa cruz en ese hoyo, te puedes imaginar el dolor tan grande que él sufrió. Cuando él cayó, esos clavos jalaron más sus manos y pies. Él lo hizo por ti.

La Biblia dice en Romanos 3:10 “Como está escrito: No hay justo, ni aun uno”. Tú no eres perfecto, yo no soy perfecto; todos somos pecadores. El versículo 23 dice:por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios”. Tú has pecado, yo he pecado y dice aquí que no podemos entrar a su gloria, pero gracias a Dios que la Biblia no termina ahí, dice Romanos 5:8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”. Esa palabra quiere decir que él dio su amor por ti y por mí a pesar de que somos malos y pecadores, él quiso morir por nosotros. En Romanos 6:23 dice: Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. Nuestro pago es que merecemos ir al infierno. Nadie de nosotros es tan bueno como para ganarse el cielo. El Señor Jesús proveyó algo para nosotros, él nos dio una manera, la Biblia dice que la dádiva de Dios es vida eterna y dice aquí que es solamente a través de Cristo Jesús Señor nuestro.

Hay una historia de un niñito que iba caminando de la escuela a su casa y un señor se acercó y le dijo que sus papás querían que él lo llevara a casa. El niño se llamaba Esteban y tenía 5 años y lo que hizo este hombre fue que lo secuestró, fue un poco antes de navidad. Sus padres estaban angustiados por lo que había pasado, lo buscaron por todos lados y no lo podían encontrar y porque era navidad sus papás ya le habían comprado un regalo. Habían puesto el regalo bajo el árbol de navidad esperando a que Esteban un día regresara a casa para que él pudiera abrir ese regalo. Llegó la navidad, pero nunca llegó este niño, nunca llegó a casa. Casi cerca de 13 años después, Esteban estaba en esa casa donde lo habían secuestrado y el hombre que lo había tomado había traído a otro niño que se llamaba Timoteo. Este hombre le había hecho muchas cosas malas a Esteban y Esteban vio como había sido traído Timoteo y no quería que le pasaran las mismas cosas malas; tenía miedo de lo que este hombre haría si ellos escapaban. 

Cuando el señor se fue a trabajar Esteban y Timoteo escaparon de la casa, corrieron y preguntaron dónde estaba la estación de policía, finalmente la encontraron y los policías dijeron: “Este es Timoteo, te hemos estado buscando”. Cuando vieron a Esteban, le preguntaron quién era. Él dijo: “Mi nombre ha sido cambiado, pero recuerdo que mi hombre era Esteban”. Él tenía 18 años. Ellos dijeron: “Eres Esteban, te hemos estado buscando por años”. Estaban tan emocionados que llamaron a sus padres y les dijeron: “Hemos encontrado a Esteban.” Por 13 años sus padres habían guardado ese regalo para Esteban, pero él día llegó que lo encontraron y lo trajeron a su padres, después de haber llorado y abrazado, le dijeron: “Esteban, tenemos algo para ti”. Fueron por ese regalo para que Esteban lo abriera y ese regalo fue abierto.

La Biblia nos dice que Dios tiene un regalo esperando para ti y para mí. Ese regalo es gratis, no tienes que hacer nada para ganarlo porque alguien te ama. El regalo que Dios tiene para nosotros es la salvación. Cuando hay regalos para ti en navidad o cumpleaños ese regalo no es tuyo hasta que lo recibes y lo abres. Ese regalo que Dios tiene ha estado para ti desde que naciste y solamente espera ser abierto. Ese regalo de la vida eterna que Dios tiene en el cielo puede ser tuyo el día de hoy y hay solamente una manera de recibir ese regalo.

Romanos 10:9 dice: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo”. Tú y yo no merecemos el cielo. Dios quiere que tú y yo reconozcamos eso. Si crees que mereces el cielo nunca vas a llegar al cielo. Dios quiere que nos humillemos y agradezcamos por su regalo. Algunas religiones enseñan que debes trabajar para llegar al cielo. No importa cuán bien te portes, eso no te llevará al cielo, eso es algo que el hombre piensa, esa manera de llegar al cielo no está en la Biblia. Hay una manera para llegar al cielo. La Biblia dice que debemos confesar con nuestra boca que él es Dios y recordar que no merecemos el cielo y darle gracias porque él murió por nuestros pecados y pedirle que él nos lleve a ese lugar. No dejes que alguien te diga que hay otra manera para llegar ahí. La Biblia tiene la respuesta y debemos seguir y confiar en él. Si no has recibido este regalo de vida eterna, por favor te pido que dejes que alguien te explique cómo recibir a Jesús. Cualquier cosa puede pasarte, pudiera ser que hoy estuvieras en un accidente, pudieras tener un problema de salud o morir repentinamente. La Biblia dice que no sabemos qué va a pasar mañana entonces asegúrate 100% como puedes ir al cielo.