Es Tiempo de Buscar a Jehová

Oseas 10:12-13

12 “Sembrad para vosotros en justicia, segad para vosotros en misericordia; haced para vosotros barbecho; porque es el tiempo de buscar a Jehová, hasta que venga y os enseñe justicia.

13 Habéis arado impiedad, y segasteis iniquidad; comeréis fruto de mentira, porque confiaste en tu camino y en la multitud de tus valientes.”

De la misma manera que alguien con una adicción se levanta cada mañana buscando su adicción es tiempo de buscar a Jehová. De la misma manera que algunos se levantan y toman su celular, que lo extrañaron tanto en la noche y comienzan a ver facebook e instagram es tiempo de buscar a Jehová. De la misma manera que deseamos la comida cuando tenemos hambre deberíamos de desear a Dios.

Oseas está hablando al pueblo de Israel y les dice que es tiempo de buscar a Jehová. ¿Por qué es tiempo de buscar a Jehová? porque le has olvidado, te has alejado, has huido y lo ignoras, pones excusa tras excusa para no buscarle. No le buscamos por nuestro pecado, por nuestra vergüenza, porque estas apartado, por lo que estás haciendo, por lo que tienes, porque sabes que Dios te va a decir que dejes ese pecado.

Cuando Dios fue al huerto del Edén y estaba buscando a Adán, Adán estaba escondiéndose, no quería hablar con Dios por el pecado que él había hecho. Cuando no le buscas es porque tienes pecado en tu vida. Una de la razones por la que un esposo no busca a la esposa y visceversa es que hay algo raro, algo está pasando, quizás es un pecado, o enojo, o hay alguien más. ¿Que hay en tu vida para que hayas dejado de buscar a Jehová?

Oseas nació aproximadamente en el año 800 a.C. Durante su ministerio que fue al reino del Norte, el de Israel, predicó a Jeroboam II uno de los reyes más malvados que tuvo Israel. Esta predicación de Oseas duró aproximadamente 80 años. 

Oseas les decía que tenían que regresar a Dios. Él llegó para mostrarles cómo habían traicionado a Dios como cuando una esposa es infiel a su marido, por esa razón Dios le dijo que se buscara y se casara con una mujer que fue Gomer. Esta mujer fue infiel y a pesar del pecado y la infidelidad de Gomer, Dios le dijo que la buscara y le dijera que la amaba, que pagara todo lo que debía y la trajera de nuevo a casa porque ese era el amor que Dios tenía para su pueblo y es el mismo amor para nosotros. Dios nos ha comprado y liberado pero nosotros somos como Gomer nos hemos ido y descarriado, traicionamos a Dios constantemente, le somos infieles y lo único que Dios quiere es nuestro amor y que le reconozcamos, que le pidamos perdón y regresemos a él.

1. No te alejes de Dios

Dios dice que es tiempo de que le busques. Levántate y busca a Jehová. Dice en Gálatas 1:6 Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente.” Quizás te esta alejando a otro evangelio, a una secta, o para irte y ser ateo o ser de una religión, pero es tiempo de acercarte a Jehová. Y de la misma manera, Dios dice cada vez que nos alejamos “estoy maravillado. Tanto amor y misericordia y perdón y eres un malagradecido”. Es tiempo de buscar a Jehová.

Hay ciertas cosas que hacen que nos alejemos de Dios. El desánimo es una de ellas. Dice la Biblia en Números 21:4 Después partieron del monte de Hor, camino del Mar Rojo, para rodear la tierra de Edom; y se desanimó el pueblo por el camino. Estaban caminando, habían visto milagros y el poder de Dios pero de repente les llega el desánimo. Dice el versículo 5 Y habló el pueblo contra Dios y contra Moisés: ¿Por qué nos hiciste subir de Egipto para que muramos en este desierto? Pues no hay pan ni agua, y nuestra alma tiene fastidio de este pan tan liviano. Cuando hay desánimo en tu vida comienzas a hablar contra Dios. Nos vemos en el espejo, vemos nuestro matrimonio, vemos nuestra situación económica y nos desanimamos, vemos que no hay trabajo, hemos perdido el negocio y vemos eso y nos olvidamos de Dios. Dice la Palabra de Dios que debemos de poner nuestros ojos en Cristo porque cuando los ponemos en este mundo nos vamos a desanimar. Si tu comienzas a poner los ojos en tu pastor te vas a desanimar, ¿Que te está desanimando?

Recuerdo a Ana de cómo ella estaba orando y vino el sacerdote Elí y le dijo borracha y Ana en vez de enojarse, de guardar rencor y amargura perdona. Perdonó a Elí y a Elcana por lo que le habían hecho, no la agarró contra Dios, ella no dejó que el enojo se convirtiera en desánimo; y el desánimo en amargura; y la amargura en rencor; y el rencor en resentimiento. No dejó que hubiere raíces de amargura. Si tienes amargura, enojo o desánimo, sácalo porque el diablo está en el negocio del desánimo.

Algo que pasa en la iglesia, algo que dicen de ti, algo que le hacen a tu hijo o a ti te puede desanimar y tenemos que ponernos de pie y limpiar ese polvo y decir, yo voy a seguir adelante, siguiendo a mi Dios. El diablo quiere que te desanimes para que dejes a Dios.

Las distracciones también te pueden alejar. Vivimos en un mundo lleno de distracciones. El diablo sabe cual es tu distracción. Quizás tu distracción no va a ser el alcohol o las drogas, quizás son mujeres, o la mentira, o el dinero. Él sabe tu pecado, sabe lo que más te gusta y eso es lo que llega tocando a tu puerta cada vez más.

Si tú en vez de que el pecado llegue a tu puerta lo estas buscando, lo vas a encontrar y el diablo va a proveer lo que tu quieras para alejarte de Dios.

2 Timoteo 2:4 dice, Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado. Tú que eres soldado de Cristo, no te enredes en este mundo, en el pecado, deja eso porque si tú estás sirviendo al que te tomó por soldado tienes que buscar agradar solamente a él, pero el diablo sabe que es lo  que más te gusta, tu canción favorita, y nos pone un señuelo y empieza a brillar, lo miras una vez y otra vez. El pastor Vineyard decía, “Joven, ¿sabes para qué está la corbata? para que cuando haya una joven semidesnuda en la calle te cubras los ojos para nos distraerte” y le decía a las muchachas, “cúbrete, vístete bien, no andes enseñando.” Hermana, cúbrete, vive para Dios y hombre, asegurate de que no te distraes con el pecado porque el diablo es bueno para distraerte.

La debilidad también te puede alejar. Romanos 14:1 dice Recibid al débil en la fe,Hay cristianos que son débiles en la fe y hay otros que ya son fuertes. ¡Gloria a Dios! 1 Corintios 15:58 dice que debemos de crecer en la obra de Dios siempre, debemos de fortalecernos y avanzar. Pero si no lees tu Biblia, no te vas a fortalecer, si no estás orando no te vas a fortalecer, si no estás viniendo a la iglesia, no te vas a fortalecer. Una persona que no come todos los días va estar débil y alguien débil se cae rápìdo. Viene el diablo y nos zarandea y nos caemos bien rápido porque estamos débiles. No estamos comiendo espiritualmente, no nos estamos fortaleciendo pero cuando te levantas y como dice Marcos 14:38 dice Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.  Esta carne es débil, por eso dice Orad. De tal manera que debemos de orar para no ser unos débiles. Si nosotros oramos y nos entregamos a él y le buscamos cada mañana vamos a fortalecernos. Comienza cada mañana de rodillas buscándole a él porque es tiempo de buscar a Jehová.

2. No aumentes tu pecado

Cuando nos alejamos de Dios, el siguiente paso que damos es aumentar nuestro pecado. Es como cuando una persona está a dieta. No come pan, ni tortillas, no toma refresco pero un día se le olvida, algo pasa, va a una fiesta y dice, bueno una tortilla no es mala. Y así somos nosotros cuando ya nos alejamos aumentamos, decimos, bueno, pues ya estoy lejos de Dios, ya no voy a la iglesia, ya no leo la Biblia, ya no gano almas, ya no estoy tan cerquita de Dios entonces eso me da el derecho de pecar más. Y ¿sabes? estas equivocado. No por el hecho de que ya te hayas alejado de Dios puedes hacer lo que tu quieres, tienes que arrepentirte, no te alejes de Dios.

Oseas 10:1 dice, Israel es una frondosa viña, que da abundante fruto para sí mismo; conforme a la abundancia de su fruto multiplicó también los altares, conforme a la bondad de su tierra aumentaron sus ídolos. Israel era un viña frondosa pero porque era una viña frondosa en vez de dar ese fruto a Dios lo dio para ella misma y a eso le llamamos egoísmo y el ser egoístas es vivir una vida para nosotros mismos; el ser egoístas es vivir una vida ignorando a Dios; el ser egoístas es cuando Dios nos da tiempo pero no le queremos dar tiempo a Dios; el ser egoísta es cuando Dios nos da trabajo cada semana y ya no queremos dar los diezmos a Dios; el ser egoísta es cuando Dios nos da talentos y no le damos ningún talento a Dios; el ser egoísta es cuando Dios nos da salvación y no le hablamos a nadie más de Cristo e Israel era egoísta. Versículo 2 dice, Está dividido su corazón. Ahora serán hallados culpables; Jehová demolerá sus altares, destruirá sus ídolos. No solo vivían una vida egoísta sino que vivían una vida exaltando a ídolos. Cuando comienzas a aumentar tu pecado, vives una vida egoísta y exaltando y adorando a otros dioses. Un ídolo es cuando quitamos nuestros ojos de Cristo y los ponemos en algo más. Nos olvidamos de Dios y ahora quizás tu ídolo es el dinero, es esa cerveza, ese cigarro, esa droga, esas películas malas y perversas, quizás es el internet, es el pecado. ¿Cuál es tu ídolo? Dios dice que no nos alejemos de él porque eso nos va a alejar más. 

El versículo 3 dice Seguramente dirán ahora: No tenemos rey, porque no temimos a Jehová; ¿y qué haría el rey por nosotros? Cuando el pueblo de Israel pidió rey, habló con Samuel y le dijeron que ellos querían un rey. Dios les había dado jueces pero ellos estaban cansados de los jueces, ellos querían rey como todas las naciones. Samuel les decía que no dejaran a Dios que era su rey. Y Dios les dio a Saúl y dejaron al Rey de reyes. 

Ellos dijeron “No tenemos rey, porque no temimos a Jehová” Ellos tenían a su rey, Jeroboam, pero decían, si ni siquiera tememos a Dios el que es nuestro rey ni siquiera es nuestro rey porque ni le obedecemos. Tenían excusas tras excusas. Cuando aumenta el pecado comienzas a dar excusas. Viene Dios y tú le dices, No, Señor no es tan malo. Viene el pastor y te dice que estas mal y tu le dices, no no estoy tan mal. Y te vas a una iglesia donde te soben la oreja. Dios vino a través de Oseas y les hizo ver su pecado. Deja de dar excusas. Cuando damos excusas tras excusas se llama ser un cínico. Eso es lo que hace el mundo pero aquí Dios no está hablando con el mundo, Dios está hablando con sus hijos y si  eres hijo de Dios no actúes como el mundo. El mundo es cínico y a veces se porta mucho mejor que muchos de nosotros. Gente de afuera tiene más moral, más decencia que nosotros que somos cristianos. 

El mundo se porta mal porque no han conocido a Dios pero tú ya conoces a Dios y cuando viene Dios y te dice que estas mal no le digas “¡Ay! Señor ¿Cómo que voy a estar mal?” Eso es cinismo. Y Dios no quiere un hijo que sea un cínico y un cristiano que pone excusa tras excusas por eso Dios dice que es tiempo de buscarlo.

Dice Oseas 1:4 Han hablado palabras jurando en vano al hacer pacto; por tanto, el juicio florecerá como ajenjo en los surcos del campo. ¿Alguna vez has jurado en vano? Un cristiano no debería de jurarle a Dios. La promesa del cristiano debe der ser sí, sí o no, no. No le jures a Dios sino simplemente dile, Señor, te voy a obedecer. Eso es ,lo que Dios quiere. Ellos juraban y el pacto que hacían lo rompían y lo rompían. Dios hizo un pacto con ellos. Cuando Dios los sacó de Egipto les dijo ustedes serán mi pueblo, y entonces Dios tratandonos a nosotros con amor, nosotros fuimos lo que quebramos el pacto, los que caímos, los que adulteramos, los que pecamos y le fuimos infieles a Dios y por eso Dios mandó a Oseas para que buscaran a Jehová. Busca a Jehová.

3. Acercate a Dios 

Oseas 11:1-3 Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.  Cuanto más yo los llamaba, tanto más se alejaban de mí; a los baales sacrificaban, y a los ídolos ofrecían sahumerios. Yo con todo eso enseñaba a andar al mismo Efraín, tomándole de los brazos; y no conoció que yo le cuidaba. Qué hermoso es ver a un papá que ve a su hijo que comienza a dar sus primeros pasos y si se tropiezan allí está papá y mamá y Dios que nos sacó de Egipto nos dice que él está a nuestro lado y nos va a ayudar y nos ayuda a dar nuestros primeros pasos y damos pasos de obediencia, nos bautizamos, comenzamos a venir fielmente, a leer la Biblia, estamos tan enamorados de nuestro Padre, pero comenzamos a crecer y nos comenzamos a olvidar de Dios. 

He visto caer a cristianos mucho mejores que yo, pastores mucho mejores que yo, y eso me trae temor y sabes Dios dice, no te alejes es más acércate porque yo te amo como un papá que te saqué de Egipto, pero aun así conociste que yo te estaba cuidando. ¿Reconoces que es Dios que te estaba cuidando en los primero años de tu cristianismo? ¿por qué te has alejado? Acercate a Dios. Santiago 4:8 dice, Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros.” 

Oseas 11:2 dice, Cuanto más yo los llamaba, tanto más se alejaban de mí; a los baales sacrificaban, y a los ídolos ofrecían sahumerios. Recuerda que Dios anhela que regreses, por eso Dios te llamaba porque él anhela, él quiere que regreses. Tenemos un Dios que nos ama, nos tiene misericordia y nos quiere perdonar, por eso Dios le dijo al profeta Oseas que se casara con Gomer y que la trajera de regreso a pesar de lo que hizo porque ese era el amor que tenía por su pueblo de Israel y tiene por nosotros. Recuerda que Dios nunca te abandona. Dice el versículo 8 ¿Cómo podré abandonarte, oh Efraín? ¿Te entregaré yo, Israel? ¿Cómo podré yo hacerte como Adma, o ponerte como a Zeboim? Mi corazón se conmueve dentro de mí, se inflama toda mi compasión. Como padres no podemos abandonar a nuestros hijos porque son nuestros hijos pero que triste es cuando escuchamos en las noticias que una mamá tuvo a su recién nacido y con un corazón frío abandona a su bebé. Vivimos en un mundo en donde el aborto es exactamente lo mismo, en donde mamás deciden abortar a sus hijos y eso es homicidio y si tú estás aprendiendo que está bien, no está bien, para Dios no está bien. Por eso Dios dice que recordemos que él nos ama, nos anhela y que no nos abandonará. Por eso es tiempo de buscar a Jehová.

El hijo pródigo le dijo a su padre que le diera todo lo que le pertenecía y después él lo desperdicio todo. Al final terminó sirviendo con los cerdos deseando comer la comida de los cerdos pero no sabía que tenía un padre que decía, “Buscame, regresa a mí”. El hijo pródigo se acordó que en la casa de su padre había comida y bendición. Él dijo me levantaré e iré a mi padre y le diré he pecado contra el cielo y contra ti, no soy digno de ser llamado tu hijo y es lo mismo que deberíamos de decirle a nuestros Dios cada vez que nos alejamos. Deberias de decirle perdóname porque hay un Padre Celestial que cada mañana sale y dice ¿será que hoy va a dejar su pecado?, ¿será que hoy va a regresar? porque le amo mucho y le anhelo. 

Es tiempo de buscar a Jehová y decirle al Señor, “Señor, perdoname porque me he alejado tanto, pero de ahora en adelante quiero estar contigo, ayúdame Señor.” 

Cuando regresamos a Dios él no nos rechaza, el nos acepta, nos perdona, tiene misericordia por eso dice sembrad para vosotros en justicia y segad para vosotros en misericordia. Dios nos dice que comencemos a vivir una vida justa y él va a tener misericordia de nosotros. Es tiempo de buscar a Jehová.