El pecado de no orar

1 Samuel 12:16-25

16 “Esperad aún ahora, y mirad esta gran cosa que Jehová hará delante de vuestros ojos.

17 ¿No es ahora la siega del trigo? Yo clamaré a Jehová, y él dará truenos y lluvias, para que conozcáis y veáis que es grande vuestra maldad que habéis hecho ante los ojos de Jehová, pidiendo para vosotros rey.

18 Y Samuel clamó a Jehová, y Jehová dio truenos y lluvias en aquel día; y todo el pueblo tuvo gran temor de Jehová y de Samuel.

19 Entonces dijo todo el pueblo a Samuel: Ruega por tus siervos a Jehová tu Dios, para que no muramos; porque a todos nuestros pecados hemos añadido este mal de pedir rey para nosotros.

20 Y Samuel respondió al pueblo: No temáis; vosotros habéis hecho todo este mal; pero con todo eso no os apartéis de en pos de Jehová, sino servidle con todo vuestro corazón.

21 No os apartéis en pos de vanidades que no aprovechan ni libran, porque son vanidades.

22 Pues Jehová no desamparará a su pueblo, por su grande nombre; porque Jehová ha querido haceros pueblo suyo.

23 Así que, lejos sea de mí que peque yo contra Jehová cesando de rogar por vosotros; antes os instruiré en el camino bueno y recto.

24 Solamente temed a Jehová y servidle de verdad con todo vuestro corazón, pues considerad cuán grandes cosas ha hecho por vosotros.

25 Mas si perseverareis en hacer mal, vosotros y vuestro rey pereceréis.”

Dice la palabra de Dios en el versículo 23 “Así que, lejos sea de mí que peque yo contra Jehová.” Quiero hablar acerca del pecado de no orar y pudiéramos añadir “el pecado de no orar a Jehová” porque algunos dirían “pues yo estoy orando a Alá” “yo estoy orando a San Isidro, a San Pedro o algún santo” pero Samuel está diciendo que él iba a orar por ellos, dice “lejos sea de mí que peque yo contra Jehová cesando de rogar por vosotros.

El pueblo de Israel acababa de pedir a Samuel rey y él habla con ellos y les dice “¿cómo es posible que quieran rey y ser similares a los pueblos de alrededor? voy a clamar a Dios y van a haber truenos y lluvias.” Dando referencia a que Dios no estaba contento con la petición del pueblo de Israel. Samuel oró y Dios mandó truenos y lluvias y me imagino que las lluvias y truenos que Dios mandó no eran unos simple truenos y lluvias sino que Dios mostró que no estaba contento con el pueblo de Israel.

Samuel les dijo: “No os apartéis en pos de vanidades que no aprovechan ni libran, porque son vanidades. Pues Jehová no desamparará a su pueblo, por su grande nombre; porque Jehová ha querido haceros pueblo suyo.” La gracia de Dios es incalculable porque nosotros a pesar de pecar una y otra vez contra Dios, Dios dice que no nos va a desamparar, no está contento con nosotros pero no nos va a desamparar. Así que, lejos sea de mí que peque yo contra Jehová cesando de rogar por vosotros; antes os instruiré en el camino bueno y recto. Dejar de orar es pecado pero ¿cuántas veces dejamos de orar a Dios? ¿Cuántas veces sentimos que todo está bien y que ya no tenemos que orar? Pensamos que los problemas se han terminado y ya no tenemos que orar, pensamos que tenemos un negocio seguro y dejamos de orar, pensamos que la quincena nos va a llegar, que tenemos buena salud y dejamos de orar, vemos a nuestra familia que está bien y dejamos de orar, sentimos que no tenemos necesidad de orar y nos olvidamos de nuestro Dios y Creador. Es pecado dejar de orar porque es un mandamiento de parte de Dios. 

1. Tenemos que orar siempre

1 Tesalonicenses 5:17 dice: Orad sin cesar. Ese verbo de orar es de forma imperativa no nos dice que si queremos orar oremos y si no no, es un mandamiento. Ora sin cesar, ora siempre, no dejes de orar. Cuando vas al camión ora, cuando estés esperando las tortillas ora, cuando estés apunto de dormir y tu mente está divagando ponte a orar, cuando Dios te despierta a las tres de la mañana ponte a orar, que no quieres orar dile al Señor: ”Señor no quiero orar, hay un callo en mi corazón, hay algo que me detiene de orar” y ora a Dios para que te permita orar y te quite ese deseo de no orar.

Romanos 12:12 dice: gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración; ¿Cuántas veces estamos yendo de un lugar a otro en el cual podemos orar? Tiempo perdido muchas veces en donde podemos orar. Dice la Biblia que hay que ser constantes en la oración. Si algo puede hablar acerca de nuestro carácter como cristianos, si algo puede hablar acerca de nuestro crecimiento como cristianos es el orar constantemente. Dice la palabra de Dios que debemos de orar constantemente. Dice colosenses 4:2 Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias; pero perseveramos en muchas cosas otras cosas, perseveramos en comer y no se nos olvida comer, somos constantes en el mal y continuamos haciendo el mal, hacemos cosas de continúo en donde Dios nos dice que tenemos malos hábitos. Tenemos malos hábitos y no tenemos hábitos buenos como la oración. Tenemos malos hábitos como tirar la basura por todos lados, de no leer la Biblia, de ser desatendidos y muchas cosas donde simplemente no tenemos ese carácter, no se nos olvida poner la telenovela, no se nos olvida poner la música en la ‘ke buena’ pero se te olvida orar. Es pecado no orar. La Biblia dice “orad sin cesar”. El no orar es desobediencia.

Dice Lucas 18:1 También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar, Debemos orar siempre. Alguien dijo: “Mucha oración, mucho poder, poca oración, poco poder, nada de oración, nada de poder”. Alguien más dijo “Si no permanecemos en la oración vamos a permanecer en la tentación.” De tal manera que debemos de orar sin cesar, debemos de enfrentarnos a este mundo de rodillas para que cuando venga la batalla podamos estar firmes. Orar es una necesidad. Jesús dijo sobre la necesidad de orar siempre y es pecado no orar siempre.

Si no estamos siempre orando estamos pecando contra Dios. Si comenzamos a orar y después dejamos de orar Dios nos dice que estamos pecando porque no estamos obedeciendo. Nos perdemos de tantas bendiciones cuando no oramos, nos perdemos del poder de Dios cuando no oramos, nos perdemos de su santificación cuando no oramos. Es un deber orar. Tenemos que orar. No nos podemos dar el lujo de no orar. Elías oró y fuego cayó; Moisés oró y el mar rojo se abrió; Sansón oró y el templo de los filisteos se derrumbó; Josué oró y el sol se detuvo en Gabaón; Abraham oró y Dios sanó a Abimelec; Isaías oró y el sol retrocedió diez grados y es difícil hacer que el sol se detenga, es difícil que la tierra que está yendo a miles kilómetros por hora en su órbita se detenga pero aun así se detuvo y cuando Isaías oró la tierra se regresó diez grados y eso creo que eso es más increíble. Elías oró y el alma del niño volvió; Ezequías oró y quince años más el Señor le dio; Eliseo oró y los ojos de sus siervo Dios abrió; Daniel oró y el sueño del rey Dios reveló; Pedro oró y a Tabita Dios levantó; Jesús oró y el pan multiplicó. Jesús no tenía que orar pero él clamó y él dio gracias a Dios y el pan se multiplicó, él pudo no haber orado, pudo haberle dicho a sus discípulos: “Nada más voy a tronar mis dedos y se va a hacer” pero él oró a Dios padre y él le contestó. Necesitamos orar más.

2. Tenemos que orar por los siervos de Dios

1 Tesalonicenses 5:25 dice: Hermanos, orad por nosotros. Pablo pudo haber dicho “Soy el gran apóstol y misionero y no necesito de sus oraciones, todo va bien.” Pero él dijo “Orad por nosotros. Dice 2 Tesalonicenses 3:1 Por lo demás, hermanos, orad por nosotros, para que la palabra del Señor corra y sea glorificada, así como lo fue entre vosotros, Seis veces Pablo pide oración por él. Necesitamos orar más por los siervos de Dios, por los pastores, por los misioneros, por los evangelistas, por los jóvenes que se han rendido para servir al Señor. Debemos orar más para que Dios levante misioneros y pastores que lleven sus palabra a otros lados, orar como Pablo pedía “orad por nosotros.”

Hebreos 13:18 dice: Orad por nosotros…” Ellos decían “somos siervos de Dios y necesitamos su oración”. Tu pastor necesita tu oración. Hebreos 13:7 dice Acordaos de vuestros pastores…” y el versículo 18 dice: orad por nosotros y yo creo que cuando dice acordaos también está diciendo no se te olvide orar por tu pastor. Ora por tu pastor, ora por pastores que han sido influencia en tu vida. Tengo una lista de pastores que han sido influencia en mi vida: Oro por el pastor Elmer Fernandez, por el pastor Ezequiel Salazar, por el pastor David Cortes, por el pastor Gil Torres, por el pastor Kevin Wynne, por el pastor Luis Ramos, por el pastor Luis Parada. Tengo una lista como de veinte pastores que han sido de influencia en mi vida, oro para que Dios los proteja, los ayude y les dé de su poder para que sigan adelante y para que no se desanimen. 

Si ha habido pastores que te han sido de influencia ora por ellos, ora por los misioneros que están en otros lugares predicando el evangelio. Por el hecho de que están sirviendo y son misioneros no quiere decir que no tengan problemas y que no la estén pasando difícil. Hay que orar por ellos, hay que decirle al Señor que los libre de pecado, de tentación. 

¿Sabías que hace tres o cuatros años en el área de Puebla había doce pastores que estaban sirviendo? Ahora tenemos tres pastores menos, pastores que han caído y ya no están en el ministerio. 25% de los pastores que estaban en el área de Puebla ya no están, es triste, hay que estar orando por ellos porque el diablo también ataca a los siervos de Dios. ¿Estás sirviendo a Dios? ¿quieres ser misionero? ¿Te graduaste de un instituto para servir a Dios? El diablo te va a atacar y si no te está atacando quizás es porque estas bien lejos de Dios pero cuando empiezas a ponerte en contra del diablo te va a atacar y necesitamos a más que oren por los siervos de Dios, ora por ellos por sabiduría, por salud, por seguridad y protección, por sanidad porque algunos están enfermos.

3. Hay que orar por los santos

¿Quienes son los santos? son aquellos que han creído en cristo, son los hermanos en Cristo. No es a los santos es por los santos. Santiago 5:16 dice: Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho. Hay que orar unos por otros. Es importante estar orando unos por otros y ser constantes en la oración, orando siempre unos por otros. Si tú conoces a alguien que está enfermo y no estás orando por él estás pecando contra Dios porque Dios dice que oremos por el enfermo. Quien sabe si a través de  tus oraciones ese hermano va a sanar, porque Dios aún escucha nuestras oraciones y porque Dios tiene poder para sanar.

Los hermanos oraron por Silas, por Jacobo cuando estaba en la cárcel hay que orar unos por otros. Colosenses 4:12 dice: Os saluda Epafras, el cual es uno de vosotros, siervo de Cristo, siempre rogando encarecidamente por vosotros en sus oraciones, para que estéis firmes, perfectos y completos en todo lo que Dios quiere. Aunque la Biblia no nos dice mucho de Epafras yo quiero ser un Epafras. Epafras era un siervo de Dios pero él estaba siempre orando y no solamente estaba siempre rogando sino que encarecidamente oraba, siempre oraba con entusiasmo y con un corazón quebrantado y Pablo lo podía ver. Epafras oraba para que los hermanos de Colosas fueran fieles a Dios y fueran perfectos y la perfección se logra cuando hay un crecimiento, cuando buscamos ser lo mejor a Cristo. Debemos de orar unos por otros, debemos orar por los hermanos. Si alguien tiene necesidad hay que orar por él pero es pecado cuando sabes que hay alguien tiene necesidad y tú no oras. Dices: “Yo merezco oración pero ¿para qué orar por alguien más?” Tienes que orar y doblar tus rodillas y buscar el rostro del Señor y pedirle perdón por no estar orando.

4. Tenemos que orar por los seres humanos

Hay que orar por esta humanidad, por todo el mundo pero no seas como aquel que dice “Señor, te pido por todo el mundo. Amén.” No hay que orar así. Hay que pedir por las peticiones y necesidades todos los días. Dice 1 Timoteo 2:1 Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; Hay que orar por todos los hombres. Samuel dijo “Lejos sea de mí que yo peque contra Jehova no orando por ustedes.” Samuel sabía que si no oraba estaba pecando. 

No solamente es una buena decisión orar y el darnos cuenta que es una necesidad sino que también que estamos pecando cuando no oramos. Alguien dijo “El día que dejas de orar por tus hijos es el día que dejas de ser un buen padre” ¿Y cuantos hemos dejado de ser buenos padres? Hay que orar por nuestros hijos, por nuestra familia, por los hermanos, por los seres humanos, hay que orar unos por otros por todos los hombres para que sean salvos. ¿Conoces a alguien que no es salvo? Quizás esa persona por la que estás orando no va a ser salva en un año, no va a ser salva en cinco años o por diez años pero tienes que seguir orando. Ora por la gente de tu ciudad, por tus familiares, quizás hermana por tu marido que no es salvo. Hay gente que no conoce quién es Jesús. Tú y yo ya lo conocemos él es el salvador, él es nuestro redentor, él vino a morir en la cruz del calvario pero hay gente alrededor que no conoce de él, que no sabe que puede perdonar los pecado y tú y yo lo tenemos y hemos sido salvos, vamos al cielo pero ¿qué de aquellas personas que no tienen? ¿Vas a orar por ellos? 

Esta humanidad necesita de Cristo y tenemos esa oportunidad para orar por todos los hombres. Dios no quiere que nadie perezca sino que todos procedan al arrepentimiento

5. Tenemos que orar por las autoridades superiores

Dice 1 timoteo 2:2 por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. En una semana habrá elecciones en los E.U. y lo que suceda allá nos afecta a nosotros quien termina siendo presidente termina afectando aquí y tenemos que suplicar. 

Lo que nosotros como cristianos hacemos y pedimos va a afectar y si no oramos y pedimos no va a yudar por eso dice la Biblia que oremos por los reyes, por los que están en eminencia y por nuestros gobernadores, presidentes municipales, por los senadores, por el presidente para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad, para que la palabra de Dios pueda seguir siendo predicada, para que nosotros podamos salir libremente y predicar el evangelio. El día de ayer pudimos ver diecisiete personas aceptar a Cristo, ¡Gloria a Dios! Hay que orar unos por otros.

Samuel dijo: “Han hecho mal en escoger un rey, han hecho mal en las decisiones que han tomado pero yo voy a orar por ustedes.” Hay que orar por aquellos que quizás han tomado malas decisiones, por aquellos que andan en pecado, por aquellos que se han apartado, aún por hermanos que han dejado a la iglesia, hay que orar unos por otros porque al final del día si no oramos estamos pecando contra Dios.

Es pecado no orar, es pecado no levantarse todos los días y ponerse de rodillas y recordar que él nos ha dado la vida, démosle gracias por la salvación. Dile: “Señor, gracias porque soy salvo, soy un malagradecido, infiel, no he sido un buen hijo perdóname Señor, ayúdame a ser un cristiano de oración.” ¿Por qué? porque es pecado no orar.