¿Es Bíblico Diezmar?

Malaquías 3:6-10

6 “Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos. 

7 Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis leyes, y no las guardasteis. Volveos a mí, y yo me volveré a vosotros, ha dicho Jehová de los ejércitos. Mas dijisteis: ¿En qué hemos de volvernos? 

8 ¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas. 

9 Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado. 

10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.

Dios, hablando con su pueblo les está diciendo que volvieran a Él, y después el pueblo dice: “No nos hemos ido, ¿en que debemos volvernos?” Dios les dice que le habían robado y dice: Traed, y traed es un mandamiento, es una palabra imperativa. 

Dios repartió la tierra a las tribus, pero a la tribu de Leví, la de los sacerdotes, no les tocó un lugar específico; ellos iban a ministrar al pueblo y el pueblo se encargaba de suplir las necesidades de los de Leví y el pueblo se aseguraba de tener alimento en la casa de Dios.

  1. La razón del diezmo

Deuteronomio 14:22 dice: Indefectiblemente diezmarás todo el producto del grano que rindiere tu campo cada año. Dios está diciendo: Me vas dar la décima parte del producto del campo. ¿Para quién era esa parte? Para Dios, dada a los levitas y Dios dice: Indefectiblemente, está diciendo: No es que si quieres o no, lo tienes que dar. De tal manera que Dios lo manda. 

Dice Levítico 27:30 Y el diezmo de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto de los árboles, de Jehová es; es cosa dedicada a Jehová.Aquí usa unas palabras interesantes, cosa dedicada, es algo que vas a dedicar de una manera especial. Por ejemplo, algunas cosas las apartamos para un uso específico y Dios dice: El diezmo de la tierra lo vas a dedicar a Dios. El versículo 31 dice:Y si alguno quisiere rescatar algo del diezmo, añadirá la quinta parte de su precio por ello.

Vamos a suponer que sembraste mangos y recogiste cien, y Dios dice que diez de esos cien mangos son de Él y los vas a dedicar a Dios. Traes tu canasta con diez mangos que le estás llevando a Dios, pero dices: “Esos mangos se ven muy ricos, los voy a rescatar. Son para Dios, pero yo me los quiero comer porque se ven muy ricos” y entonces vamos a suponer que el precio de esos diez mangos son $100 y Dios dice: Los quieres, pero te va a costar una quinta parte del precio de ellos. Vas a pagar $100 más la quinta parte, $20. Entonces te costaría $120 porque los quieres rescatar. Pero el diezmo era algo dedicado a Dios. 

También el diezmo era algo consagrado. Ve lo que dice el versículo 32 Y todo diezmo de vacas o de ovejas, de todo lo que pasa bajo la vara, el diezmo será consagrado a Jehová. Los rabinos explican que cuando eran contadas las vacas y las ovejas eran metidas a un lugar especial, tenían que pasar por cierta puerta en donde la persona que los iba contando tenía una vara, y esa vara normalmente la metía en un colorante que le llaman vervellón y entonces pasaban los animales y la persona que los iba contando marcaba al décimo con esa vara y ya que tenían a todos, tenían la cuenta de los animales que se iban a diezmar, pero se iban a consagrar a Jehová. Versículo 33 dice:  No mirará si es bueno o malo, ni lo cambiará; y si lo cambiare, tanto él como el que se dio en cambio serán cosas sagradas; no podrán ser rescatados. Dice Dios: ya que los pasaste por esa vara, cuando cuentes el número diez y veas que está bien grande, gordo y bonito y lo quieras para ti, esos si no los puedes rescatar, será consagrado. Dice el versículo 34 Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de Israel, en el monte de Sinaí.

El diezmo es algo consagrado, debería ser lo primero que le damos a Dios, por eso la Biblia nos habla de las primicias, no de lo último, de lo más feo, no de lo que nos queda. El diezmo también es honrar a Dios. Proverbio 3:9 dice: “Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos;” No dice que lo último de tus frutos, sino primicias.

Entonces, regresando al ejemplo de los mangos, no vas a agarrar los mangos más feos, que están podridos y le dices al Señor: “Te ofrezco estos mangos podridos, eran cien, quedaron diez”, sino que las primicias, lo primero lo vas a consagrar, lo vas a dedicar. Es algo que Dios quiere y le honra a Dios.

Filipenses 4:16-18 dice:pues aun a Tesalónica me enviasteis una y otra vez para mis necesidades. No es que busque dádivas, sino que busco fruto que abunde en vuestra cuenta. Cuando la iglesia de Filipos enviaba a Pablo estas dádivas, él decía que no estaba buscando su dinero, sino que estaba buscando hacer de eso para que él pudiera seguir predicando el evangelio, seguir siendo salva y la gente que era salva era un resultado de lo que ellos le daban y es fruto que abundaba a la cuenta de ellos. ¿Cuál cuenta? Una cuenta celestial en donde la gente que es salva era parte de lo que esa iglesia hacía. Pero todo lo he recibido, y tengo abundancia; estoy lleno, habiendo recibido de Epafrodito lo que enviasteis; olor fragante, sacrificio acepto, agradable a Dios. De tal manera que lo que damos a Dios, sea que demos diezmos, ofrendas, nuestra ayuda a los misioneros, todo eso es algo que honra a Dios, es algo que agrada a Dios. Y Dios usa ese dinero para seguir alcanzado a las almas, que la gente siga siendo salva. Es por eso que en nuestra iglesia tenemos esto que le llamamos conferencia de misiones, y la iglesia se reúne para decir: Vamos a seguir apoyando a misioneros para que sigan llevando el evangelio alrededor del mundo.

Jacob estaba en camino hacia la casa de su tío Labán y en algún lugar se duerme y tiene un sueño y dice Génesis 28:16-22 “Y despertó Jacob de su sueño, y dijo: Ciertamente Jehová está en este lugar, y yo no lo sabía. Y tuvo miedo, y dijo: ¡Cuán terrible es este lugar! No es otra cosa que casa de Dios, y puerta del cielo. Y se levantó Jacob de mañana, y tomó la piedra que había puesto de cabecera, y la alzó por señal, y derramó aceite encima de ella. Y llamó el nombre de aquel lugar Bet-el, aunque Luz era el nombre de la ciudad primero. E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir, y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios. Y esta piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti.

De tal manera que cuando apartamos algo, no es que de repente algo se aparta por sí solo. No es que de repente algo aparezca por sí solo. Si apartamos algo es porque de manera directa, de manera consciente, es una acción que nos lleva a apartar algo y Jacob está diciendo: “Señor, si vas conmigo yo voy a apartar el diezmo para ti.” Esto fue antes de la ley porque realmente Jacob era Israel, esto fue antes de que los hijos de Israel fueran a Egipto y pasaron 430 años y salieran de Egipto, antes de que Dios diera la ley. El diezmo es algo que apartamos para Dios. 

Dice Números 18:21 Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo de reunión. Dios está diciendo de los levitas que ellos estaban sirviendo, ellos tenían un ministerio, se encargaban de enseñar la ley, de orar por el pueblo, de traer sacrificios, era un trabajo lo que hacían los levitas. El versículo 24 dice: Porque a los levitas he dado por heredad los diezmos de los hijos de Israel, que ofrecerán a Jehová en ofrenda; por lo cual les he dicho: Entre los hijos de Israel no poseerán heredad. Ellos no tenían parte en la tierra prometida, a ellos no les tocó un pedazo de tierra, como ellos eran los sacerdotes, ellos tenían que vivir del pueblo. La iglesia fue  instituida por Dios y parte de la función de la iglesia es por supuesto predicar el evangelio, es autónoma, no recibe ayuda del gobierno, pero hay una separación de iglesia y Estado y hay que orar que la iglesia tenga esa autonomía y capacidad de predicar el evangelio; la iglesia se autosustenta de  los diezmos de sus miembros. Una de las razones por las que podemos tener servicios cada domingo es que gracias a Dios, tenemos un edificio, luz, sillas, salones, pero es a través de los miembros de la iglesia y le damos gracias a Dios por la iglesia, por los hermanos y por el ánimo de la iglesia de que podemos seguir adelante.

Necesitamos también usar el dinero bien y otra de las funciones de parte de la iglesia es orar para que el dinero que entra no se lo robe el pastor, que de los hermanos que administran el dinero no digan: “Trae zapatos nuevos, se me hace que este hermano se compró los zapatos con mi dinero.” Cuando damos el dinero se lo damos a Dios y estamos orando que los hermanos encargados y el pastor usen ese dinero bien, pero no recibimos dinero del gobierno, es la misma iglesia. Muchas veces encontramos a quienes brincan de iglesia en iglesia y no porque sean chapulines, sino porque sienten la presión del diezmo y se van a otra iglesia. El diezmo es una bendición, es algo con lo que podemos agradar a Dios, es algo que Dios nos dio y le damos de regreso a Dios. 

En 1 Crónicas 29 está David y están haciendo una ofrenda voluntaria del pueblo para tener los recursos para hacer el templo que hace Salomón y la gente cuando comienza a dar a Dios no terminan llorando, sino que terminan gozosos. ¿Sabes que hay algo cuando damos de manera voluntaria? Cuando damos a alguna causa, algo hay que nos hace sentir bien. 1 Crónicas 29:14 dice: Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos. Todo es de Dios. Él nos da sabiduría, inteligencia, fuerzas para levantarnos cada mañana, Dios nos ayuda y permite ir a trabajar y ese dinero que nos ganamos, la décima parte es de Dios. Es una orden, pero aún cuando es una orden, porque había ciertos mandamientos en donde por ejemplo Dios decía que si un niño maldecía a su padre, lo tenían que apedrear, pero no dice: Si alguien falla en dar el diezmo, lo van a apedrear; entonces, es un mandamiento voluntario. Sí es mandamiento, pero Dios no dice que nos va a matar si no lo hacemos. Por eso dice “para que pudiésemos ofrecer voluntariamente ” Aún cuando Dios lo ordena, Dios no castiga a quien no lo da. Pero si hay cierto tipo de maldición. ¿Cuál es esa maldición? Quizás es que mi tierra que quizás recogí cien mangos, el siguiente año, no me va a ir tan bien. Quizás me quedé una de las vacas, y Dios dice que no me va a ir bien de alguna manera. El diezmo es voluntario, pero si no diezmamos no hay bendición.

Malaquías 3:11 dice: Reprenderé también por vosotros al devorador, y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será estéril, dice Jehová de los ejércitos.  Y todas las naciones os dirán bienaventurados; porque seréis tierra deseable, dice Jehová de los ejércitos. Dios dice: “Si diezmas, te voy a bendecir, abriré las ventanas de los cielos y derramaré bendición hasta que sobreabunde.” Y Lucas 18:12 dice:ayuno dos veces a la semana, doy diezmos de todo lo que gano.Este hombre rico era rico de manera financiera y dice: lo que gano, yo lo diezmo. De tal manera que el diezmo es la décima parte de todo lo que ganamos.

No he visto a alguien que es fiel a la iglesia, que comienza a diezmar y que no ve la bendición de Dios. ¡Dios bendice! Y creo que muchos pueden testificar: “Pastor, llevo un año de diezmar y no sé cómo me lo puedo explicar, pero cuando diezmamos nuestra familia y yo, Dios continúa bendiciendo.” Cuando dejamos de diezmar es cuando empezamos a decir: “¿Por qué estamos pasando esto?” Es porque somos bien tacaños, muy incrédulos, decimos: “Señor, ¿cómo es que puedes hacer más en mi vida y en mi familia con el 90% que con el 100%?” No sé, pero aún si Dios no lo hiciera y fuera mandamiento, lo deberíamos hacer, pero qué bendición que cuando diezmamos, Dios bendice.

¿Es bíblico diezmar? Sí.