Amistades:

Amistades tóxicas que envenenan tu Vida

2 Samuel 13:1-7

1 “Aconteció después de esto, que teniendo Absalón hijo de David una hermana hermosa que se llamaba Tamar, se enamoró de ella Amnón hijo de David. 

2 Y estaba Amnón angustiado hasta enfermarse por Tamar su hermana, pues por ser ella virgen, le parecía a Amnón que sería difícil hacerle cosa alguna. 

3 Y Amnón tenía un amigo que se llamaba Jonadab, hijo de Simea, hermano de David; y Jonadab era hombre muy astuto. 

4 Y este le dijo: Hijo del rey, ¿por qué de día en día vas enflaqueciendo así? ¿No me lo descubrirás a mí? Y Amnón le respondió: Yo amo a Tamar la hermana de Absalón mi hermano. 

5 Y Jonadab le dijo: Acuéstate en tu cama, y finge que estás enfermo; y cuando tu padre viniere a visitarte, dile: Te ruego que venga mi hermana Tamar, para que me dé de comer, y prepare delante de mí alguna vianda, para que al verla yo la coma de su mano. 

6 Se acostó, pues, Amnón, y fingió que estaba enfermo; y vino el rey a visitarle. Y dijo Amnón al rey: Yo te ruego que venga mi hermana Tamar, y haga delante de mí dos hojuelas, para que coma yo de su mano.

7 Y David envió a Tamar a su casa, diciendo: Ve ahora a casa de Amnón tu hermano, y hazle de comer. ”

¿Alguna vez te has intoxicado? Una persona que se ha intoxicado es porque comió, bebió, o tocó algo que no fue bueno para su cuerpo. En nuestra vida diaria llegamos a encontrar personas que nos hacen mal, que no nos ayudan, que en vez de edificarnos nos comienzan a intoxicar. Si te has llegado a intoxicar empiezan ciertos signos como las ronchas y te empiezas a hinchar y dejas de respirar y en algunas ocasiones puedes morir.

Las historia que vemos de Amnón es que él tenía una amistad tóxica. Dice la palabra de Dios que tenía un amigo que se llamaba Jonadab y él lo vio y dijo: “¿Qué te está pasando? Estás enflaqueciendo, algo raro hay en ti” y Amnón dijo que estaba enamorado, pero más que nada él estaba infatuado, estaba obsesionado por Tamar y Jonadab le dijo: “¿Por qué no finges que estás enfermo?” De tal manera que Amnón hizo caso a su amigo y fingió que estaba enfermo y entonces cuando estaba en su cama vino su papá, (él era el primogénito del rey David) y David lo vio acostado y dijo: “Hijo, ¿qué tienes?” Él dijo: “Papá, tengo coronavirus” y su papá le dijo: “Te voy a mandar a una cocinera, voy a mandar a doña Lola.” y Amnón dijo: “A ella no, ¿por qué no mandas mejor a Tamar?” ¿Tamar estaba fea o hermosa? Hermosa y cuando ella vino, Amnón se aprovecha de Tamar. ¿Por causa de quién? De Jonadab.

1. Una amistad tóxica te va a aconsejar mal

La primera cosa de una amistad tóxica es que te va aconsejar mal. Una mala amistad te va a dar malos consejos y cuando vayas con esa persona y le digas ¿Qué hago? Te va a decir “divórciate”, “no hagas eso, la Biblia dice eso, pero yo he hecho esto y eso te va a ayudar”, y te va dar un consejo fuera de la voluntad de Dios. Salmos 1:1 dice: “Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores,” puedes seguir el consejo de Dios o seguir el consejo de una amistad mala y tienes que decir: Si me está dando un consejo fuera de la voluntad de Dios es una mala amistad. 

Una mala amistad te va a aconsejar mal, te va a aconsejar fuera de la voluntad de Dios.

Hace años estaba en Iguala, Guerrero y cuando estaba en segundo año de preparatoria mis papás iban a salir y uno de mis amigos se enteró y me dijo: “¿Y tú papá va a dejar su carro? ¿y si hacemos algo? ¿por qué no vamos al pozo Melendez?” A ese pozo iban personas malas y echaban cuerpos pero él quería ir para ver el pozo. Habían matado a alguien y se decía que lo habían aventado ahí, pero mi amigo dijo: “¿Por qué no vamos al pozo meléndez?” y uno de sonso lo escucha, y tendemos a escuchar a las malas amistades y entonces, mis papás se fueron, dejaron las llaves y me dijeron: “Portate bien.”  Por cierto papá, aunque tú le digas a tus hijos que se porten bien, el diablo es diablo y va a traer influencias, va a hacer cosas para que no se porten bien; se fueron mis papás y tomamos el carro y nos fuimos al pozo y lo vimos y nos dimos la vuelta, el pozo está hacia Taxco y regresando en una curva, perdí el control del carro y empezó a dar vueltas y nos salimos y caímos a una cuneta, pero después de la cuneta había un precipicio y yo creo que un poquito más y nos hubiéramos matado y eso porque escuché el consejo de una mala amistad. 

Una mala amistad te va a aconsejar mal. No escuches a las malas amistades. Tú vas a decir “ya no sé qué hacer, estoy preocupado, tengo este problema” y de repente te llama tu amigo y te pregunta cómo estás y tú le dices que no tienes dinero, y él te va a decir: “Tengo un trabajito para ti, ¿quieres vender algo?” y te van a dar un mal consejo. 

2. Una amistad tóxica va a apapachar tu pecado. 

En la palabra de Dios tenemos una historia, dice Génesis 38:12-13 Pasaron muchos días, y murió la hija de Súa, mujer de Judá. Después Judá se consoló, y subía a los trasquiladores de sus ovejas a Timnat, él y su amigo Hira el adulamita. Y fue dado aviso a Tamar, diciendo: He aquí tu suegro sube a Timnat a trasquilar sus ovejas.”  Y dice el versículo 20 “Y Judá envió el cabrito de las cabras por medio de su amigo el adulamita, para que este recibiese la prenda de la mujer; pero no la halló. Judá le había prometido a Tamar que le iba a dar a su hijo como esposo, ya había crecido el muchacho y no se le había dado por esposo y dijo ella: “¿Dónde está mi marido?” y la costumbre de ese tiempo el levantar y criar a esos hijos y mantener el linaje era muy importante, y a esta muchacha se le ocurre una mala idea y dice: “Si no puedo tener hijos de mi marido, voy a tener hijos de mi suegro” y mientras tanto Judá iba con su amigo y encuentran a la muchacha que se había vestido de ramera y dice: “No le vayas a decir a nadie” y Judá se va con esta muchacha y ella le dice que como le va a pagar y él le da tres prendas mientras le mandaba un cabrito y ella acepta.

Judá se va ¿y a quién manda a buscar a esa muchacha? A Hira y le dice: “Aquí está el cabrito, ¿recuerdas que me eché una canita al aire?” No le dijo: ¿Recuerdas que fui un adúltero? ¿Recuerdas que lo que hice estuvo mal? Sino que le dijo ve a pagar mi pecado y para eso sí somos buenos para pagar nuestro pecado. Y Judá mandó a su amigo que va y busca a esa muchacha y no la encuentra, y lo que sucede es una historia larga, pero Hira estaba encubriendo el pecado de Judá.

Una mala amistad es aquella persona que tapa tu pecado que apapacha tu pecado, que le dices: No le digas a nadie, que nadie se entere. “¡Ay pastor! ¿no se supone que para eso son las amistades? Porque una amistad debe ser fiel, se supone que no traiciona, se supone que va a estar de mi lado”; pero dice la palabra de Dios que debemos obedecer a Dios antes que a los hombres, el libro de Proverbios dice que si el pecador te quisiera engañar no consientas, si te quiere llevar a hacer lo malo no consientas; va a haber personas que van a apapachar tu pecado porque ellos también lo hacen, van a apapachar tu mentira porque ellos también mienten, van a apapachar tu fornicación porque ellos también fornican y encubren tu pecado. Esa es una amistad tóxica, una buena amistad es la que afila tu rostro. Dice Proverbios 27:17 “Hierro con hierro se aguza; Y así el hombre aguza el rostro de su amigo.” Un amigo no es para quitarte el filo espiritual, un amigo es para darte más filo, para hacerte mejor, un cuchillo es mejor cuando está afilado. Pero viene un amigo y apapacha un pecado y entonces te está quitando el filo de tu vida, te está intoxicando.

Recuerdo que estaba en el colegio bíblico e iba en el carro de un amigo y le iba a hablar mal de otro muchacho y le dije: ¿Te acuerdas de tal y tal? Y él me volteó a ver y dijo: “Si me vas a hablar mal de esa persona, bájate de mi carro, no quiero escuchar nada.” Él estaba afilándome, me estaba ayudando a ser mejor y una buena amistad es aquel a quien le dices voy a hacer esto y él te dice: Eso está mal, no lo hagas, en vez de encubrir tu pecado. Pero es una amistad mala si le dices voy a hacer algo malo y él te dice: “Esta bien, yo no le digo a tu esposa, ni a tus hijos, aquí se queda, nadie se va a enterar.” Pero Dios lo ve todo y todo se da a conocer, tú vas a estar tratando de tapar tu pecado y pecado es pecado y un amigo que te está ayudando a apapachar tu pecado es una amistad tóxica.

  1. Una amistad tóxica es aquella que te aparta de Dios

Si tienes una amistad que constantemente te está sacando de las cosas de Dios y te aparta de Dios esa es una amistad tóxica. Dice la biblia en 2 Crónicas 20:35 Pasadas estas cosas, Josafat rey de Judá trabó amistad con Ocozías rey de Israel, el cual era dado a la impiedad, Ten cuidado de las amistades que te apartan de Dios porque eso es lo que el diablo quiere, quiere apartarte de Dios. Deuteronomio 13:6 dice: Si te incitare tu hermano, hijo de tu madre, o tu hijo, tu hija, tu mujer o tu amigo íntimo, diciendo en secreto: Vamos y sirvamos a dioses ajenos, que ni tú ni tus padres conocisteis, ¿Podrá algún familiar ser una relación tóxica para nosotros? Sí, algunos los domingo están yendo a un a casa donde se burlan de Dios, donde se burlan de la Biblia y se pasan tomando, escuchando cosas que no deben, viendo cosas que no deben y ahí están los hijos y tú estás recibiendo toda esa negatividad, y es una relación tóxica que debes dejar. “Ay pastor, es mi familia” No importa.

Dicen los versículos 7 y 8 de los dioses de los pueblos que están en vuestros alrededores, cerca de ti o lejos de ti, desde un extremo de la tierra hasta el otro extremo de ella; 8 no consentirás con él, ni le prestarás oído; ni tu ojo le compadecerá, ni le tendrás misericordia, ni lo encubrirás, Dios dice que no lo escuches, te está apartando de Dios.

La tercera amistad tóxica es la amistad que te aparta de Dios. Hay amigos que te quieren apartar de Dios. Esas amistades por más ganas que tengas de servir a Dios, de ir a la iglesia y aunque digas: “Tengo que estar con mi familia y estar en el trabajo, tengo que echarle ganas, Dios está transformando mi vida” Y sí el puede hacer maravillas y quiere hacer algo grande con tu vida, pero cuando tienes amistades que te están apartando de Dios, que están haciendo que dejes las cosas de Dios, ellos van a ganar porque esas amistades son tan difíciles de cortar y de terminar. 

¿Qué hacer? Una de dos: muévete, cambiate de ese lugar o comienza a predicarles. Diles: Jesús quiere cambiar tu vida, quiere salvarte, voy a empezar a hablar de mi Cristo, de lo que Jesús ha hecho en mi vida, como él me ha cambiado, ya no estoy tomando, ya trato mejor a mi esposa, tengo mis hijos, Dios está haciendo algo en mí. Cristo te ama. Ven a mi iglesia, y esa amistad va a venir a la iglesia y Dios va a hacer algo en su vida o se va a apartar, pero tienes que predicarle a esa amistad tóxica.

4. Una amistad tóxica te va a arruinar

2 Samuel 13:28 dice:Y Absalón había dado orden a sus criados, diciendo: Os ruego que miréis cuando el corazón de Amnón esté alegre por el vino; y al decir yo: Herid a Amnón, entonces matadle, y no temáis, pues yo os lo he mandado. Esforzaos, pues, y sed valientes.

Absalón había visto lo que Amnón había hecho. La noticia de lo que Amnón había hecho con su media hermana había llegado a los oídos de David. A Absalón no le gustó que Amnón se aprovechara de su hermana. Durante un periodo de dos años Absalón tenía  amargura y enojo, él decía: “Esto no se va a quedar así.” Imagínate tener amargura y resentimiento y cada vez que veía a Amnón tenía ganas de matarlo y por dos años en su mente estaba maquinando la manera de cómo lo iba a matar. Él hizo una fiesta e invitó a todos su hermanos y también invitó a su papá y si ves en la historia, Absalón insistió con David su papá: “Por favor, ven.” Me pregunto si iba a confesarle que quería matar a su hermano Amnón y quería que David le ayudara a no hacerlo, pero David dijo: “No quiero ser gravoso.” Papá, en ocasiones nuestros hijos dice: papá, ven, ayudame, pero David no quería ser gravoso y mandó a todos sus hijos y ahí estaba Amnón y dijo: “Me voy a vengar” y le dijo a sus siervos que lo mataran y sus siervos mataron a Amnón.

Amnón tenía un amigo que se llamaba Jonadab. Cuando él le dio este mal consejo, Amnón no sabía que iba a morir, pero esa mala amistad lo llevó a su destrucción. Una amistad tóxica te va a destruir.

Dice el versículo 32 Pero Jonadab, hijo de Simea hermano de David, habló y dijo: No diga mi señor que han dado muerte a todos los jóvenes hijos del rey, pues sólo Amnón ha sido muerto; porque por mandato de Absalón esto había sido determinado desde el día en que Amnón forzó a Tamar su hermana. ¿Cuando había sido determinada la muerte de Amnón? El mismo día que Amnón forzó a Tamar. 

Una amistad tóxica te va a arruinar, va a terminar con tu vida. Hay que tener cuidado con esas amistades tóxicas. Nunca vas a poder crecer espiritualmente cuando sigues manteniendo una mala amistad que te está arrastrando fuera de la voluntad de Dios. Hay que terminar con esas amistades. Aléjate o predícale, pero algo tienes que hacer.