Una descendencia para Dios

Isaías 39:8

Y dijo Ezequías a Isaías: La palabra de Jehová que has hablado es buena. Y añadió: A lo menos, haya paz y seguridad en mis días.

Ezequías era un miserable, una sabandija, un desgraciado. ¿Sabes que le habían dicho? No creas que fueron a bendecirlo, a echarle flores, o a echarle piropos, fueron a decirle que sus hijos iban a ser esclavos. Dicen los versículos 5 al 7 “Entonces dijo Isaías a Ezequías: Oye palabra de Jehová de los ejércitos: He aquí vienen días en que será llevado a Babilonia todo lo que hay en tu casa, y lo que tus padres han atesorado hasta hoy; ninguna cosa quedará, dice Jehová.De tus hijos que saldrán de ti, y que habrás engendrado, tomarán, y serán eunucos en el palacio del rey de Babilonia.” No era una bendición, no era un elogio, era una sentencia para la siguiente generación, le estaban diciendo a Ezequías: “Tus hijos van a ser esclavos, todo lo que tienes se va a perder, y tus hijos van a sufrir, la siguiente generación ya no va estar.” Y dijo Ezequías: “La palabra de Jehová que has hablado es buena. Y añadió: A lo menos, haya paz y seguridad en mis días.” Qué miserable, le empezaron a decir de su siguiente generación, de su futuro, pero él dijo: “ay les va a ir mal, van a ser esclavos, pero de perdida yo voy a estar bien.”

Poco nos ponemos a pensar en nuestra siguiente generación. Nuestro cristianismo está pasando por tiempos difíciles, tiempos de apostasía, tiempos de judaizantes, tiempos de feminismo en la iglesia, tiempos peligrosos donde muchos están apostatando de la fe y es el deber de cada hermano y hermana levantar una siguiente generación que se pare por la sana doctrina, que se pare por las sendas antiguas, que se pare por la palabra de Dios y que se guarden del mundo como siempre lo ha hecho la iglesia del Señor Jesucristo, pero decimos “con que yo esté bien”, “pues que mis hijos decidan”,“Pues yo mientras estuve les enseñé…” y con eso nos justificamos. 

No se digan los solteros. Ni por la mente les pasa ¿estás orando por tus hijos? Es más fácil decir: “¡Qué feos tiempos!, por eso no voy a tener hijos, puros perrijos.” Estamos creando una generación de gente estúpida, perdón que te lo diga. Dios nos ordenó a tener hijos. Es un mandato de Dios, pero ahora estamos teniendo tiempos peligrosos y no queremos una responsabilidad. Y papá ¿estás pensando y planeando que va a pasar con tu hijos el día que ya no estés?

La palabra de Jehová que has hablado es buena. A lo menos, haya paz y seguridad en mis días.” Dijo Ezequías. Y ya no vamos a hablar de este hombre, pero quiero hablar de un hombre increíble que trascendió a través del tiempo, de un hombre que impactó a una generación completa y a la que sigue, al punto que fue una referencia de Dios mismo. Ese hombre llamaba Jonadab hijo de Recab

Él fue un padre increíble, fue un hombre que vivió con una vida tan tremenda, que aun lo que él le dijo a sus hijos, sus hijos, sus nietos y bisnietos lo hicieron. ¿Nuestros hijos nos respetan? Te fijas que vivimos en un tiempo donde los hijos ya no respetan a los padres. Somos la generación que recibió órdenes de su padre y que ahora recibimos órdenes de sus hijos, y nos quejamos pero tú eres el papá y tú eres la mamá, tú los dejaste. Sí así como te hablan tus hijos, así le hubieras hablado a tu papá o a tu abuelo, ¿qué te hubiera pasado? Papá, tú eres la autoridad, mamá, eres la ayuda de la autoridad, pero ahora, todos quieren hacer las cosas como se les pega la gana y la mano de Dios no está sobre la familia y nos quejamos, pero no hacemos las cosas en orden: Papá, mamá, hijos y Dios sobre todas las cosas, pero ahora mandan los hijos, después el perro, luego la señora y al último el papá ¿y así quieres que Dios te bendiga?

Por cierto, solteros, les voy a dar un consejo. Muchos me dicen: “Pastor, yo me case con este viejo y no sabía que era golpeador, marihuano, y no me respeta.” ¿Quieres ver como tu ‘crush’ te va a tratar en el matrimonio? Fíjate cómo trata a sus papás. Te gusta la muchacha, muy guapa, egresada del colegio, canta bonito, pero no respeta a sus papás, no se somete a su papá, así te va a ir. Ves a tu crush que está feo, pero se viste bien y dices “es mi príncipe azul, si viera pastor, cómo me habla”, pero es grosero con su mamá, así te va a tratar cuando vivas con él. 

Fracasamos porque no hacemos las cosas en orden. Decimos que son otros tiempos, pero mientras vivan en tu casa y mientras les das de comer, de vestir y los mantienes, tu voz es la que cuenta. Dios puso un orden, y en el orden Dios puso a los papás para que los papás atesoren para los hijos, para que los papás instruyan a los hijos, para que los papás sean un influencia tremenda en el corazón de los hijos y que la siguiente generación preserve las cosas de Dios.

Jonadab fue un hombre que impactó a todas sus generaciones porque Jonadab, hijo de Recab, cuidó mucho sus amistades. Dice 2 Reyes 10:15-17 Yéndose luego de allí, se encontró con Jonadab hijo de Recab; y después que lo hubo saludado, le dijo: ¿Es recto tu corazón, como el mío es recto con el tuyo? Y Jonadab dijo: Lo es. Pues que lo es, dame la mano. Y él le dio la mano. Luego lo hizo subir consigo en el carro, Jehú era el macho alfa, era tremendo, que cuando mató a Jezabel, se fue a comer y después la acabó de matar. Fue un hombre tremendo, pero Jehú tenía buenos amigos. Jehú iba en el carro y se encontró a Jonadab. y le dijo: Ven conmigo, y verás mi celo por Jehová. Lo pusieron, pues, en su carro. Y luego que Jehú hubo llegado a Samaria, mató a todos los que habían quedado de Acab en Samaria, hasta exterminarlos, conforme a la palabra de Jehová, que había hablado por Elías.Jonadab fue usado por Dios porque tenía buenas amistades. ¿Con quién se juntan tus hijos?

No me vengas con esa mentira de decir: “Pastor, yo voy con ellos, ellos toman pero yo no.” Vas a acabar tomando, no se necesita ser muy inteligente para saber eso. Papá, mamá por cierto, Dios nos ha dado un sentido de discernimiento para saber cuando nuestros hijos tienen malas amistades, aun dentro de la iglesia. ¿Sabías que hay muchachos y muchachas mañosos en las iglesias fundamentales de sana doctrina? Hay muchachos que dicen que van  a la iglesia, al culto de jóvenes y no van y los papás confían en que el escuincle está en la iglesia, pero no es cierto. Cuida sus amistades.

Si tienes un muchachito varón y estás orando por él, y si ves que se le acerca una muchacha volada y perversa, hermana, eres mujer, puedes discernir que esa muchacha tiene otra intención, yo no sé cómo lo hacen, pero tienen buen ojo para eso. Si tienes hijas señoritas, cuida con quien se juntan. Las amistades determinan mucho qué tipo de persona vamos a hacer. Fue por malas amistades que empezamos a hacer tonterías. Cuida con quien se juntan tus hijos. Amnón violó a su hermana Tamar porque un primo se lo aconsejó. Cuidemos a la siguiente generación. Cuida también a tus amistades, los muchacho no son tontos, nuestros hijos saben cómo vivimos, cómo nos tratamos entre parejas. Hay una estadística que dice que del 70% al 90% de los hijos de los cristianos se van al mundo nada más cumplen los 18 años, y ¿sabes por qué? porque nos ven bien falsos, porque no somos íntegros, tenemos amigos mundanos. ¿Quién es tu comadre? debería ser alguien de la iglesia, y no cualquiera sino alguien que te rete a hacer más cosas por Dios. Pero no queremos hablar con nadie, y nuestros hijos nos ven, y por eso, están como están porque no nos gusta habitar en la iglesia, no queremos hacer nexos en la iglesia y si tus hijos no hablan contigo, están hablando con alguien más. Si tu esposa no está hablando contigo con alguien más lo está haciendo, si no tienes el corazón de tus hijos, alguien más, lo tiene. Por eso dice la Biblia “Dame hijo mío tu corazón” Por eso fracasamos en la siguiente generación porque no somos íntegros, no nos relacionamos con las personas correctas.

Jonadab tenía buenos amigos, Jehú le dijo: “súbete al carro y vas a ver mi celo por Jehová” y los dos se retaban. Consiguete un buen amigo en la iglesia porque todos pasamos más o menos los mismos problemas, pero aprendemos a fingir.

Muchachos, yo sé lo difícil que es ser un muchacho cristiano en estos tiempos, pero no escogemos bien nuestras amistades, consiguete un buen amigo que te rete y te diga: “Yo no soy perfecto, y tú menos pero vamos a echarle ganas.” A alguien que te diga “¿por qué no estuviste en el culto?” “Vamos a servir a Dios.” Ten buenos amigos, eso te va a ayudar mucho. Jonadab tuvo amigos que le motivaban a servir más a Dios. 

2 Reyes 10:23 dice: Y entró Jehú con Jonadab hijo de Recab en el templo de Baal, y dijo a los siervos de Baal: Mirad y ved que no haya aquí entre vosotros alguno de los siervos de Jehová, sino sólo los siervos de Baal.¿Sabes lo que hizo Jehú? Jehú dijo “Acab sirvió a Baal pero yo lo voy a servir más.” ¿Era verdad? No. Él les dijo a sus hombres que mataran a todos los siervos  de Baal. 

Dios nos ha permitido pasar por ciertas cosas. Dios no salvó y permitió que nos pasaran cosas antes de ser salvos o después de ser salvos. Algunos venimos de trasfondos difíciles, de errores muy graves, de metidas de pata,  y ahora que estamos en Cristo todo ese conocimiento , todo eso que a lo mejor ya lo quieres olvidar, lo debes usar para la gloria de Dios. Por ejemplo, si tú, hermana, eras buena para la política, hacías juntas, andabas con los diputados, toda esa experiencia que obtuviste convenciendo a los demás a comer Omnilife lo puedes usar para traer gente a la iglesia. Muchos hombres nos jactamos: “Antes de Cristo, a mí me decían el diablo y me peleaba con veinte pandilleros…” pero ahora te manda tu mujer. Di ahora “no mujer, Dios nos trajo a esta iglesia y ahí vamos a seguir. A mí no me andes diciendo esas cosas, he decidido vivir por Cristo y lo vamos a hacer.” Jehú era canijo y con engaños trajo a todos e hizo la voluntad de Dios. 

Hay hermanas que tienen un instinto de persuasión tremendo, usa esa persuasión para lo bueno. Esas cosas que nos servían en el mundo, usemosla para Dios. Mucha gente dice: “Yo a las 5 am estoy en el campo, mire las manos parece lijas.” pero aquí no quiere hacer nada por Dios. “Desde chiquita a las 4 am ya estaba echando tortillas” Pero en la iglesia no quiere cambiar un pañal de un niño. Acuérdate lo que hacías antes y aplicalo para las cosas de Dios. No te pido algo que no tienes, sino algo que ya te la sabes.

Muchos anduvimos en lugares en donde no debimos haber andado y hay otros que no. Muchos la regamos cuando éramos jóvenes, no se te olvide, no te enorgullezcas, pero úsalo para la gloria de Dios. 

Un muchacho de la iglesia se fue al mundo y estuvimos por horas con él diciéndole: Mira, no te vayas, te va a ir mal. Pero se fue, al medio año regresó, pidió perdón y Dios lo restauró y le está echando ganas, está sirviendo a Dios, y yo le digo: Ya te la sabes, cuando veas a uno de los jóvenes que se quiere ir, ve y diles y como te fue. ¿No le dijo eso Cristo al endemoniado gadareno “Ve a los tuyos y cuéntales cuán grandes cosas ha hecho el Señor contigo”?

Dios te permitió pasar por tantas cosas, tantos quebrantos y no fue de a gratis si no que con esa experiencia puedes ayudar a otros.

Dice 2 Reyes 10:31 Mas Jehú no cuidó de andar en la ley de Jehová Dios de Israel con todo su corazón, ni se apartó de los pecados de Jeroboam, el que había hecho pecar a Israel.Jehú no fue íntegro, fue tremendo, tenía mucho celo por Dios, pero había pecados que no quiso dejar y solo cuatro generaciones después de él, siguieron sirviendo a Dios.

Jeremías 35:1-9 dice:

1 “Palabra de Jehová que vino a Jeremías en días de Joacim hijo de Josías, rey de Judá, diciendo:

2 Ve a casa de los recabitas y habla con ellos, e introdúcelos en la casa de Jehová, en uno de los aposentos, y dales a beber vino.

3 Tomé entonces a Jaazanías hijo de Jeremías, hijo de Habasinías, a sus hermanos, a todos sus hijos, y a toda la familia de los recabitas;

4 y los llevé a la casa de Jehová, al aposento de los hijos de Hanán hijo de Igdalías, varón de Dios, el cual estaba junto al aposento de los príncipes, que estaba sobre el aposento de Maasías hijo de Salum, guarda de la puerta.

5 Y puse delante de los hijos de la familia de los recabitas tazas y copas llenas de vino, y les dije: Bebed vino.”

Dios le quería dar un ejemplo a su pueblo. Jonadab hijo de Recab ya había muerto y de su descendencia se había hecho una tribu: los recabitas. Para dar este ejemplo, Dios apostó por el impacto de Jonadab a sus futuras generaciones. El siervo de Dios invitó a los descendientes de Jonadab y llevó a todos al templo y los sentó en el templo y el siervo de Dios, en la casa de Dios, ordenado por Dios les dijo: “Tomate este vino.”  Y era en serio, Dios le dijo. Y ellos dijeron que no. 

6 “Mas ellos dijeron: No beberemos vino; porque Jonadab hijo de Recab nuestro padre nos ordenó diciendo: No beberéis jamás vino vosotros ni vuestros hijos;

7 ni edificaréis casa, ni sembraréis sementera, ni plantaréis viña, ni la retendréis; sino que moraréis en tiendas todos vuestros días, para que viváis muchos días sobre la faz de la tierra donde vosotros habitáis.

8 Y nosotros hemos obedecido a la voz de nuestro padre Jonadab hijo de Recab en todas las cosas que nos mandó, de no beber vino en todos nuestros días, ni nosotros, ni nuestras mujeres, ni nuestros hijos ni nuestras hijas; 

9 y de no edificar casas para nuestra morada, y de no tener viña, ni heredad, ni sementera.

¿Habrá sido un buen padre Jonadab? Que ya ni estaban ni sus huesos y Dios apostó por él y le dijo al siervo de Dios: Fíjate como son los hijos de este hombre, fíjate cómo aunque se les dice que lo hagan, ellos se paran firmes por su convicción. Por pocos hombres Dios puso las manos al fuego, uno de ellos fue Job “¿No has considerado a mi siervo Job?”. Que Dios diga eso de nosotros, lo dudo. De Abraham dijo: “¿Encubriré yo a Abraham lo que voy a hacer, habiendo de ser Abraham una nación grande y fuerte, y habiendo de ser benditas en él todas las naciones de la tierra? Porque yo sé que mandará a sus hijos y a su casa después de sí, que guarden el camino de Jehová.” (Génesis 18:17-19)

Si mueres hoy, ¿Tus hijos van a venir al culto el próximo domingo? Si te enfermas y quedas en cama ¿estás seguro que tus hijos van a seguir viniendo a la iglesia y amando a Dios?

Dios le dijo a su pueblo en Jeremías 35:13-15 “Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Ve y di a los varones de Judá, y a los moradores de Jerusalén: ¿No aprenderéis a obedecer mis palabras? dice Jehová.  Fue firme la palabra de Jonadab hijo de Recab, el cual mandó a sus hijos que no bebiesen vino, y no lo han bebido hasta hoy, por obedecer al mandamiento de su padre; y yo os he hablado a vosotros desde temprano y sin cesar, y no me habéis oído. Y envié a vosotros todos mis siervos los profetas, desde temprano y sin cesar, para deciros: Volveos ahora cada uno de vuestro mal camino, y enmendad vuestras obras, y no vayáis tras dioses ajenos para servirles, y viviréis en la tierra que di a vosotros y a vuestros padres; mas no inclinasteis vuestro oído, ni me oísteis. Ciertamente los hijos de Jonadab hijo de Recab tuvieron por firme el mandamiento que les dio su padre; pero este pueblo no me ha obedecido.

Los recabitas no tuvieron una vida, moraron en tiendas, moraron en el desierto, no tuvieron lujos, ni un buen nombre, no tuvieron muchas riquezas, nada material. Su papá Jonadab, no les dejó nada y todavía les dijo que no hicieran casas, que fueran nómadas toda su vida. Pero mira lo dice el versículo 19 por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: No faltará de Jonadab hijo de Recab un varón que esté en mi presencia todos los días.  Que Dios diga esto de nosotros: Mira, cómo se están esforzando, como papá y mamá están orando e instruyendo a sus hijos, quizás no les dejaron lujos y grandes cosas, pero por ser fieles no les va a faltar todos los días, uno de sus hijos que esté en mi presencia siempre. 

Es lo mejor que les podemos dejar a nuestros hijos, que bueno por la educación, por la herencia pero la fe. Que Dios diga de nosotros: De tu familia siempre voy a dejar a uno, por lo menos que esté en mi presencia todos los días.

Si yo voy a ser un padre exitoso es cuando mis hijos aprendan a caminar con nuestro Dios. Todo lo demás sobra, lo importante es ser como Jonadab, que nuestra descendencia siga estando en la presencia de Dios todos los días.