¿Dónde se te cayó el hacha?

2 Reyes 6:1-6

1 “Los hijos de los profetas dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho.

2 Vamos ahora al Jordán, y tomemos de allí cada uno una viga, y hagamos allí lugar en que habitemos. Y él dijo: Andad.

3 Y dijo uno: Te rogamos que vengas con tus siervos. Y él respondió: Yo iré.

4 Se fue, pues, con ellos; y cuando llegaron al Jordán, cortaron la madera.

5 Y aconteció que mientras uno derribaba un árbol, se le cayó el hacha en el agua; y gritó diciendo: !!Ah, señor mío, era prestada!

6 El varón de Dios preguntó: ¿Dónde cayó? Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y lo echó allí; e hizo flotar el hierro.”

Vemos este relato cuando Eliseo tiene a unos jóvenes, a los hijos de los profetas y ellos bajan a cortar unos árboles para hacer más amplio el lugar en que estaban y ellos estaban trabajando y a uno de ellos se le cayó el hacha. Aquí no se habla de Eliseo pero ¿quién era Eliseo? Elías es un hombre muy conocido y Eliseo fue su sucesor. 

Dice 2 Reyes 2:1- 14

1 “Aconteció que cuando quiso Jehová alzar a Elías en un torbellino al cielo, Elías venía con Eliseo de Gilgal.

2 Y dijo Elías a Eliseo: Quédate ahora aquí, porque Jehová me ha enviado a Bet-el. Y Eliseo dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Descendieron, pues, a Bet-el.

3 Y saliendo a Eliseo los hijos de los profetas que estaban en Bet-el, le dijeron: ¿Sabes que Jehová te quitará hoy a tu señor de sobre ti? Y él dijo: Sí, yo lo sé; callad.

4 Y Elías le volvió a decir: Eliseo, quédate aquí ahora, porque Jehová me ha enviado a Jericó. Y él dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Vinieron, pues, a Jericó.

5 Y se acercaron a Eliseo los hijos de los profetas que estaban en Jericó, y le dijeron: ¿Sabes que Jehová te quitará hoy a tu señor de sobre ti? El respondió: Sí, yo lo sé; callad.

6 Y Elías le dijo: Te ruego que te quedes aquí, porque Jehová me ha enviado al Jordán. Y él dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Fueron, pues, ambos.

7 Y vinieron cincuenta varones de los hijos de los profetas, y se pararon delante a lo lejos; y ellos dos se pararon junto al Jordán.

8 Tomando entonces Elías su manto, lo dobló, y golpeó las aguas, las cuales se apartaron a uno y a otro lado, y pasaron ambos por lo seco.

9 Cuando habían pasado, Elías dijo a Eliseo: Pide lo que quieras que haga por ti, antes que yo sea quitado de ti. Y dijo Eliseo: Te ruego que una doble porción de tu espíritu sea sobre mí.

10 El le dijo: Cosa difícil has pedido. Si me vieres cuando fuere quitado de ti, te será hecho así; mas si no, no.

11 Y aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos; y Elías subió al cielo en un torbellino.

12 Viéndolo Eliseo, clamaba: !!Padre mío, padre mío, carro de Israel y su gente de a caballo! Y nunca más le vio; y tomando sus vestidos, los rompió en dos partes.

13 Alzó luego el manto de Elías que se le había caído, y volvió, y se paró a la orilla del Jordán.

14 Y tomando el manto de Elías que se le había caído, golpeó las aguas, y dijo: ¿Dónde está Jehová, el Dios de Elías? Y así que hubo golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pasó Eliseo.” 

Eliseo fue el sucesor de Elías era un acompañante, un discípulo de Elías y en varias ocasiones los profetas le dijeron: “¿Sabes que Dios te va a quitar hoy a tu señor?” y él les decía: “sí yo sé, callad”, en otras palabras cállense. Elías fue un un hombre extrovertido pero Eliseo introvertido. El ministerio de Elías fue público, recordemos lo que pasó en el monte Carmelo cuando Elías dijo “Si Jehová es Dios que haga descender fuego y vamos a hacer un sacrificio” y los profetas de Baal clamaron a su dios y no les respondió, después clamó Elias y descendió fuego del cielo. El ministerio de Eliseo fue más privado recordemos cuando trató a Naamán fue más de uno a uno, no fue de multitud. Elías trató a reyes y Eliseo a personas comunes y corrientes. Otra diferencia fue que Elias no vio la muerte y Eliseo sí. En 2 Reyes vemos un milagro que ni aun Elías hizo pero Eliseo sí, él hizo flotar el hacha. Todos los pastores somos diferentes siempre y cuando se predique la Biblia está bien pero hay muchos que son extrovertidos o otros más tranquilos pero mientras Dios nos use está bien. 

2 Reyes 6:1 dice: “Los hijos de los profetas dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho.” Ya vimos quien era Eliseo, fue el sucesor de Elías, fue un hombre introvertido. Se cree que esto era como un instituto, estos jóvenes vieron el poder de Dios en el varón Eliseo.  Estos jóvenes querían estar preparados. Se cree que estaban preparándose con Eliseo. Si cada cristiano tuviera ese deseo de cada vez estar más preparados, otra cosa seríamos como cristianos. Vemos también que estos jóvenes eran personas que tenían el deseo y que veían la necesidad del ministerio porque dice “He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho.” Ellos veían la necesidad, ellos decían: “Ya somos muchos, ya no entramos, hay que extendernos” y debemos de aprender a ser cristionos qe vean la necesidad. Si cada cristiano viera la necesidad en su iglesia que dijeran “Pastor, tenemos esta necesidad” pero no solo ver la necesidad porque dice “Los hijos de los profetas dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho. Vamos ahora al Jordán, y tomemos de allí cada uno una viga, y hagamos allí lugar en que habitemos.” No dijeron “pues está bien estrecho más vale que consigas algo más grande.” Si cada cristiano tuviera el deseo de crecer y ensancharse.

Dice Isaias 54:2 Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas. Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones, y habitará las ciudades asoladas. Dios nos dice que no seamos estrechos sino  que nos ensanchemos y crezcamos.

Ellos vieron la necesidad y tenían el deseo de ensancharse y otra cosa que vemos en 2 Reyes 6:2 Vamos ahora al Jordán, eran personas que tenían iniciativa. ¿No crees que el pastor quiere hermanos que tengan iniciativa? Que digan “Pastor, ¿que hacemos?, ¿cómo ve esto?” que no digan “pues el pastor no me dice, pues yo estoy esperando pero el pastor no me dice nada.” Estas personas eran cristianos que querían ser parte de la obra  y tomemos de allí cada uno una viga, y hagamos allí lugar en que habitemos. Y él dijo: Andad. Debemos de ser cristianos dispuestos a trabajar.

Dice el versículo 3 Y dijo uno: Te rogamos que vengas con tus siervos. Y él respondió: Yo iré. Aquí vemos a estas personas y ellas tenían buena relación con su líder porque le decían “ven con nosotros”. Yo no sé si Eliseo era chistoso, no sé qué hacía pero a ellos les gustaba andar con Eliseo. Ellos querían andar con su líder. A veces a los jóvenes no les gusta andar con sus papás prefieren andar con otros jóvenes, pero a ellos les gustaba estar con su líder y a su líder le gustaba andar con ellos, dice en Salmos 133:1 “¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía! Ellos querían convivir con su líder y su líder también. “Y él respondió: Yo iré. También vemos a un líder que se involucró porque él decía yo voy a ir con ustedes, 

Es bueno ver la necesidad, tener el deseo de trabajar, tener iniciativa, querer involucrarse en la obra pero en nuestro trabajo tengamos cuidado de nuestra hacha. Estos hombre fueron a trabajar  y dicen los versículos 4 y 5 “Se fue, pues, con ellos; y cuando llegaron al Jordán, cortaron la madera. Y aconteció que mientras uno derribaba un árbol, se le cayó el hacha en el agua; y gritó diciendo: !!Ah, señor mío, era prestada!” Vemos que su herramienta era el hacha. Aquí en Puebla batallé para encontrar un hacha es más fácil encontrar un iphone, cualquier cosa menos un hacha. Algunos jóvenes nunca han visto un hacha. Pero estos eran personas que tenían el deseo de trabajar e involucrarse pero el hacha era la herramienta que usaban. El hacha nos habla del poder de Dios en el cristiano. 

Este hombre estaba cortando el árbol y se le cayó el hacha y solo se quedó con el mango. Él pudo fingir que estaba trabajando y solo iba a aparentar que estaba haciendo algo cuando no estaba haciendo nada y así hay muchos cristianos que se les ha caído el hacha y solo fingen, hacen escándalo pero en realidad no están haciendo nada porque se les cayó el hacha. El hacha representa el poder de Dios, del Espíritu Santo y cuando el Espíritu Santo se aparta de nosotros solo le vamos a estar haciendo al tonto, solo vamos a estar haciendo ruido, se va a ver como que hacemos algo pero no estamos haciendo nada.

Estos hombres cuando iban a ir a trabajar tenían que afilar el hacha con una piedra porque tenían que ir a trabajar. El hacha tiene que estar bien afilada. Diario tenemos que pasar tiempo con Dios afilando el hacha, pasar tiempo con Dios en su palabra, vivir de una manera que agrade a Dios, algunos no tiene nada de filo porque han descuidado su filo.

Eclesiastés 10:10 dice: Si se embotare el hierro, y su filo no fuere amolado, hay que añadir entonces más fuerza; pero la sabiduría es provechosa para dirigir. Si se desgasta el filo hay que añadir más fuerza. Es como cuando quieres partir una naranja con un cuchillo que no tiene filo, es más fácil que la destripes a que la partas porque no tiene filo y así hay muchos cristianos que no tienen filo y cuando no tienen filo tienen que ponerle más fuerza pero cuando andan mas filosos el mismo Espíritu Santo les usa para que la gente responda. Dice la palabra de Dios que si hubiéramos pasado tiempo en su presencia y si hubiéramos afilado bien el hacha no tendríamos que ponerle tanta fuerza. Lo correcto no es ponerle más fuerza sino afilarla, diario tenemos que sacarle filo pasando tiempo con Dios, diario estarle sacando filo en la palabra de Dios, vivir de una manera que le agrade a Dios.

Juan 15:4-5 dice: Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. Si se te cae el hacha y te quedas el mango, haz el ruido que quieras, haz como que estás haciendo pero en realidad no estás haciendo nada. Dice Salmos 127:1-2  “Si Jehová no edificare la casa, En vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, En vano vela la guardia. Por demás es que os levantéis de madrugada, y vayáis tarde a reposar, Y que comáis pan de dolores; Pues que a su amado dará Dios el sueño.” Si se nos cae el hacha separados de él nada podemos hacer.  Zacarías 4:6 dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos. No es con espada es con el poder de Dios. 

¿Cómo está tu hacha? ¿La estás afilando o está toda roma? 

Dice Efesios 4:30 Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención.No debemos hacer que el Espíritu Santo se apague.

Este hombre estaba trabajando y por un descuido se le cayó. Hay métodos para afianzar el hacha. Cuando se compra un hacha nueva se puede meter en un bote con agua y se deja, entonces se esponja la madera y se aprieta más; otros le meten clavos para que se aguce o meterle una cuña de metal para que la madera se abra y se apriete y muchos no tenían cuidado de esto y así hay muchos cristianos y hasta pastores que descuidaron su lectura bíblica, su oración, su caminar con Dios y se les cayó el hacha y después solo estaban fingiendo y ya no cargan el hacha pero se veía como que todavía trabajaban.

Si se te cae el hacha sé sincero con Dios. Este hombre estaba trabajando y se le cayó el hacha y el pudo fingir porque Eliseo lo estaba viendo pero él fue sincero. Si no estás afilando tu hacha reconoce que no estás afilando tu hacha y que se te ha caído, no finjas y dile al Señor: “Se me cayó el hacha, contristé al Espíritu Santo, no cargo el poder de Dios en mi vida, solo le estoy haciendo al cuento”. Cada cristiano sabe cuando anda bien y cuando no anda bien con Dios y a veces lo andamos haciendo en la carne.

Tristemente Sansón no se dio cuenta cuando el Espíritu Santo se apartó de él. En el Antiguo Testamento el Espíritu Santo no estaba en los cristianos, estaba sobre ellos y nosotros ahora tenemos el privilegio de que el Espíritu Santo more en nosotros. Sansón anduvo jugando con el pecado, haciendo cosas indebidas y pensaba que todo estaba bien, dice Jueces 16:20 Y le dijo: !!Sansón, los filisteos sobre ti! Y luego que despertó él de su sueño, se dijo: Esta vez saldré como las otras y me escaparé. Pero él no sabía que Jehová ya se había apartado de él. Sansón no se dio cuenta cuando la presencia de Dios se apartó de él y así hay muchos que andan viviendo en el pecado y dicen “Dios está conmigo” pero Dios está en medio de la santidad por eso dice “Volveos a mí”. Tristemente muchos cristianos ni se dan cuenta que ya contrataron al Espíritu Santo.

Sé sincero si se te ha caído el hacha dile: “Señor, la verdad se me cayó el hacha, es la razón por la que ando frustrado y desanimado.”

2 Reyes 6:6 dice: El varón de Dios preguntó: ¿Dónde cayó? Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y lo echó allí; e hizo flotar el hierro En la Biblia hay varias preguntas que Dios hace y parecen preguntas ilógicas pero las hace con una intención. Cuando Adán y Eva pecaron, Dios le dijo al hombre ¿Dónde estás tú? ¿Qué acaso Dios no sabía dónde estaban? Sí. Dios le estaba diciendo: “Sé donde estás físicamente pero quiero que te des cuenta donde estás espiritualmente. Cuando Caín mató a su hermano Dios le preguntó ¿Qué has hecho? Dios sabía lo que había hecho pero quería que Caín reconociera lo que hizo. Cuando Dios le preguntó a Jacob ¿Cuál es tu nombre? Dios sabía cómo se llamaba? Sí sabía pero le decía “Sé sincero conmigo”. Cuando David pecó con Betsabé un tiempo quiso aparentar y no le salieron las cosas como él quería, él quiso fingir hasta que Dios lo reprendió con el profeta Natán. Sé sincero ¿Dónde se te cayó el hacha? No estemos fingiendo.

Dice 1 Juan 1:8-9 “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” Si confesamos y somos sinceros con Dios, si le decimos: “Señor, se me cayó el hacha y solo quiero aparentar que todo está bien cuando no es así” Dios nos va a perdonar. Proverbios 28:13 dice: El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.Dice que el que encubre sus pecados no prosperará podrá hacerlo como quiera pero no prosperará.

2 Reyes 6:6 dice: El varón de Dios preguntó: ¿Dónde cayó? Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y lo echó allí; e hizo flotar el hierro. El varón preguntó y este hombre fue sincero. ¿Dónde se cayó el hacha? a lo mejor en la noche cuando estuviste haciendo algo que no debiste haber estado haciendo, a veces solo decimos: “Perdona mis pecados’. Amén” y Dios dice: “¿Cuál pecado? ¿Cuál de todos? Confiesame tus pecados los de la semana pasada, los de ayer” Juan 1:9 dice “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” Dios quiere que le digamos “Ahí Señor, en la casa cuando estaba viendo algo que no debería de ver”, “en el trabajo cuando estaba coqueteando con alguien que no debería de coquetear.” Dios quiere que le digamos en donde. David le dijo a Dios en Salmos 51 “líbrame de adulterio, de homicidio” David reconoció que había matado y reconoció  y dijo “Ahí se me cayó el hacha por causa de mi rebeldía y perversidad  maté a Urías. “

En el versículo 6 dice: Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y lo echó allí; e hizo flotar el hierro.Una hacha nueva aproximadamente pesa dos kilos y es algo sobrenatural meter un hacha en el agua y hacerla flotar, no era algo ligero, era algo pesado. El varón de Dios metió un palo y con el poder de Dios la hizo flotar. No hay ser humano que pueda perdonar pecados pero Dios puede hacer algo sobrenatural: perdonar nuestros pecados y no solamente perdonar nuestros pecado sino devolvernos el hacha.

Dice el versículo 7 Y dijo: Tómalo. Y él extendió la mano, y lo tomó. Si reconocemos nuestros pecados, si nos arrepentimos y confesamos el pecado, el Espíritu viene otra vez a estar  en relación con nosotros y nosotros tener relación con él y nos puede usar otra vez. 

¿Dónde se te cayó el hacha? ¿Cómo está tu hacha? ¿la estás afilando a diario? Si se te cayó el hacha ya no finjas, ya no le hagas como que le estás haciendo algo cuando en realidad no estás haciendo nada, si se te cayó sé sincero con Dios.

Hay muchos cristianos que se ven bien bonitos pero no cargan el hacha. El palo sin el hacha no sirve de nada solo para hacer escándalo y para aparentar, pero el hacha completa y bien afilada es eficiente y puede hacer su trabajo. 

¿Por qué no le dices: “Señor la verdad se me cayó el hacha”? y si la tienes bien afiliada síguela cuidándola, sigue manteniendo tu relación con Dios, tu lectura bíblica, tu oración. Cuida tu hacha que no se te vaya a caer pero si se te cayó sé sincero con Dios y Dios puede hacer algo sobre sobrenatural y volverte el poder del Espíritu Santo